domingo, 27 de julio de 2008

LA MODA ESTÁ DE MODA - La República

LA MODA ESTÁ DE MODA
Camilo Herrera Mora
Especial para La República
Julio de 2008

El primer semestre del presente año, el sector textil dio mucho de qué hablar por la compra de Coltejer por parte de Kaltex y el impacto de la revaluación en el sector; ahora el segundo semestre será mucho más calmado porque la dinámica del comercio de confecciones se va a dinamizar, por su propio ciclo de consumo.

Es prudente hacer un alto en el camino y hacer reflexiones un poco más profundas sobre lo que ha pasado en el sector en los últimos años, para tener la imagen completa del mercado. El sector textil tiene una grandes inversiones en plantas, edificios y tecnología que causaron sobre esta industria un gran peso en sus balances en el momento de la crisis económica de 1.999 y anteriores, al punto que el nivel de endeudamiento promedio era del 54% y pérdidas de cerca del 10%, y esto sumado a la entrada en 2.005 del bloque asiático al comercio mundial de moda, reduciendo los precios medios de los textiles, generó que el sector redujera sus producciones y comenzará un proceso de renovación de plantas y de especialización a ciertos textiles en los que podemos ser competitivos; por esto cuando llega la revaluación, el sector está en una dinámica de cambio que lo hace tener serios problemas en las ventas internas, por la entrada de los textiles asiáticos.

Paralelamente, el sector confecciones ha comenzado a comprender la importancia del mercado externo y ha aprovechado sabiamente la diversificación de mercados que se ha dado en los últimos 5 años, con una gran dinámica en las fronteras; según el DANE entre enero y abril de 2.008 exportamos US$340 millones y solo importamos US$57 millones, causando una balanza comercial positiva que refleja el cambio de este flujo internacional: en 1.991 exportamos a Estados Unidos US$195 millones y en 2.006 ya estábamos exportando US$426 millones. Esto inicio con un proceso de maquila simple, hasta llegar al “full full package”, que incluye diseño, insumos, corte y armado.

Internamente, el colombiano ha mantenido su tendencia de compra, pero esta comienza a cambiar. En 1.999 de cada $1.000 que gastábamos, $76 pesos en confecciones, y tan sólo gastamos $45. Inicialmente se podría pensar que gastamos menos, pero no, gastamos más y esto se debe a que el nivel de precios del sector ha permanecido casi constante, aumentando en 9 años tan sólo 14%. Finalmente el consumidor ha salido ganando, porque la apertura, la revaluación y los precios estables, han causado que la oferta de confecciones y calzado haya aumentado multiplicándose por más de diez, y aumentando la presencia de marcas internacionales.

Este mapa ha causado lo inevitable: la moda se inserto en la globalización. Compramos marcas internacionales en Colombia, compramos textiles asiáticos baratos y exportamos confecciones a casi todo el mundo. Pero esto conlleva, obviamente, que nuestro mercado tenga que continuar con su reposicionamiento estratégico. En 1.991 el estudio Monitor decía que el país podría ser altamente competitivo en ropa interior femenina. Algunos no le dieron importancia a esto y otros, como Leonisa, colmaron el mercado norteamericano y otros posicionaron los vestidos de baño de Onda del Mar como los más reconocidos.

Hoy, el sector moda recupera su vigor pese al efecto revaluación, teniendo una balanza comercial positiva de US$374 millones de dólares en los primeros 4 meses del año; ya en 2.007, de 1.000 cosas que producía la economía, 7 son bienes de confecciones y 16 son de textiles; las rentabilidades de los sectores fueron de 3,26% y 2,55%, respetivamente. Y lo más interesante es la recuperación del nivel de endeudamiento en el sector textil a 44% a finales de 2.007, lo que indica la razón de la menor rentabilidad.

Ya Colombia comprendió que la moda es una industria y que mueve al país, al empleo, a los hogares y a las personas. La moda está de moda, y es el momento de dar el segundo paso: creemos marcas internacionales y mostrémosle al mundo nuestra creatividad, calidad y competitividad que disfrutamos durante todo el día con nuestra ropa.

1 comentario:

Edgar Schneider Cespedes Sabogal dijo...

Hola
señor Camilo Herrera

Soy yo de nuevo el muchacho que le comento en otro Post. (y por supuesto sigo haciéndole seguimiento a sus artículos tanto en los medios impresos - El espectador- como por este medio.
Me surgió una pregunta de su ultimo post, es relacionada con el nivel de endeudamiento y la menor/mayor rentabilidad de acuerdo a es este.
Busque por Google "nivel de endeudamiento" y pues me aclaro que es el grado de apalancamiento e indica la participación de los acreedores sobre los activos de la compañia ... ((Total Pasivo / Total Activo)... bien. Me pregunto, por ejemplo; ¿Que pasa si ese nivel de endeudamiento es alto en un industria?, ¿cuales son los riesgos en el entorno de adelgazamiento del consumo? y ¿Que relación tiene este nivel de endeudamiento con el menor o mayor rentabilidad?.

Bueno Gracias.

Por ultimo quiero decirle que he comenzado a coleccionar sus artículos impresos de "El espectador" por las graficas - recuerdo la ultima que me llamo la atención - ¿Eramos Marqueros?. Es que usted por este medio no las publica.

Bueno, chao. Gracias.